Los sistemas de bucle magnético son incomprensiblemente unos grandes desconocidos. Decimos que es incomprensible su desconocimiento por que no se trata de sistemas de coste elevado ni de instalación complicada, y su uso supone un aumento notable en la calidad de audición (y calidad de vida) de las personas usuarias de audífonos o implante coclear.
Su instalación está recomendada en todos los lugares en los que se preste atención al público: mostradores, taquillas, recepciones,… así como en recintos de espectáculos y auditorios: iglesias, cines, salas de conciertos, salas de reuniones,…
La mayoría de audífonos actuales tienen un interruptor con las siguientes posiciones:
- “M’, que corresponde a Micrófono,
- ‘T’, que corresponde a Telebobina
- ‘O’, que corresponde a Off o apagado.
Un Sistema de Lazo de Inducción transmite una señal de audio directamente al audífono cuando este se coloca en posición “T”, reduciendo el ruido de fondo, así como la reverberación y otras distorsiones acústicas que reducen la calidad del sonido.
Estos productos se basan en el electromagnetismo. El dispositivo recibe la señal acústica, como la voz o la salida de sonido de un televisor y la transforma en un campo magnético, el cual no es apenas atenuado ni distorsionado como si ocurre con las ondas sonoras en el aire y no son paradas por mamparas, cristales ni otros cerramientos. Este campo magnético llega al audífono, y si está en posición “T”, lo capta y transforma nuevamente en ondas sonoras, que el usuario oye nítidamente.
Este dispositivo soluciona los problemas de inteligibilidad producidos por el ruido de fondo, la distancia entre el emisor y receptor, y la reverberación o eco que provoca el sonido en todas las superficies de una sala o recinto cerrado
.
Su instalación es muy sencilla. Consiste en rodear con un cable de cobre la superficie a acondicionar, ya sea a ras del suelo, a media altura o en el techo (lo más recomendable sería situarlo a la altura del oído). Cada extremo de este cable se conecta al aparato-bucle-amplificador.
Al enviar corriente a este cable, se crea un campo magnético que atraviesa la superficie acondicionada. Este campo magnético es la señal que va a llegar al audífono o implante coclear. Por tanto, para la instalación, habrá que evitar elementos metálicos que puedan interferir con este campo magnético, como pueden ser detectores metálicos o un mallado de acero en el techo, por ejemplo.
El cable deberá estar por lo menos a unos 50 cm de mallados metálicos y nunca dentro de una canaleta metálica. Tampoco deberá ir paralelo a cables de audio o video, ya que interfieren con la señal.
Según el tamaño y el volumen de local, se dimensiona el amplificador más adecuado.
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